Luis Advíncula, el “Hombre rayo"

Comenzó su carrera como delantero y fue Roberto Mosquera quien lo mando a la banda. Luis Advíncula sentía que después de la banda, lo que tocaría sería la tribuna, sin saber que años más adelante se volvería una pieza clave en el 11 de Ricardo Gareca, jugando una copa mundial y logrando el subcampeonato en la Copa América Brasil 2019.

Rápido como un rayo y analítico como un científico, Luis Advíncula ha aprendido, con el pasar de los años, a complementar su velocidad física con su velocidad mental y el criterio para tomar decisiones ante situaciones límite. Los años le han caído bien al buen “Lucho”, aunque acepta que tanto el como el gran porcentaje de jugadores nacionales, ha demorado en madurar.

Debutó en Juan Aurich en el año 2009 y un año más tarde daría el primer gran paso de su carrera firmando por Sporting Cristal en donde se mantuvo 4 años. De ahí en adelante su carrera sería bastante intermitente, Hoffenheim, Ponte Preta, Vitória Setúbal, Buraspor, Newell’s Old Boys, Tigres y Lobos BUAP, 7 equipos en casi 7 años. Pero todo cambió cuando llegó a Rayo Vallecano a tras el mundial de Rusia 2018. Advíncula se estableció en Madrid y tiene en mente seguir en el equipo de Vallecas por un tiempo más, a pesar de haber tenido más ofertas.

Y es que “Lucho” entendió que no se trata de ir cambiando de equipos y de ciudades, sino que se trata de establecerse en una ciudad, demostrar de lo que eres capaz y crecer futbolísticamente, el cambio de equipo es una situación complementaria. Le costó y mucho en entender de lo que realmente se trata, pero hoy, a sus 30 años, Advíncula no es más un niño, y así como aprendió a tomar las mejores decisiones en la cancha, también aprendió a tomar las mejores decisiones en su vida.

Alegre, carismático, bailarín fuera de la cancha, serio, decidido y agresivo -sin confundir con agresor- en el terreno de juego, ese es Luis Jan Piers Advíncula Castrillón, aquel jugador que solo conoce de amigos, tanto así que Guerrero decidió ponerle a uno de sus caballos el nombre del veloz jugador, y que se ha vuelto un referente en la Selección Nacional. Puede que le moleste que le digan “tío”, pero eso es simplemente un reconocimiento a su trayectoria y respeto a su carrera. “Lucho” está en la mejor etapa de su carrera y aún tiene mucho para darle a la “Bicolor”.

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