Agustín Lozano se pronunció ante la quita de sede para el Mundial Sub 17

Luego del vergonzoso suceso de este viernes, donde se confirmó la cancelación del Mundial Sub 17 tras la orden emitida por la FIFA por un tema de plazos para poder albergar dicho evento deportivo, el mandamás de la Federación Peruana de Fútbol, Agustín Lozano, dio la cara para hacer sentir su pena y aclarar algunos puntos inconclusos.

"Lamento mucho que la FIFA haya tomado esta decisión. El Estado peruano, a pesar de haber estado colaborando, no ha podido cumplir con los tiempos para el mejoramiento de la infraestructura y faltó firmar lo de los impuestos", expresó en primer momento Lozano a RPP Noticias.

Agregó: "En junio recién iban a comenzar los trabajos, que duraban aproximadamente tres meses y eso, para la FIFA, era imposible porque la programación del Mundial está prevista para el mes de octubre".

Asimismo, se dio tiempo para hablar sobre las personas involucradas al tema de infraestructura y organización del Mundial, que ahora será llevado a Brasil. Bajo esa primicia, Agustín Lozano dijo que no es quién para juzgar a nadie, sino en cambio tan solo agradecer por el esfuerzo puesto. 

"No estoy para juzgar a nadie, solo para agradecer a quienes pusieron todo su esfuerzo; al Estado peruano, al presidente de la República, al ministro de educación, al Comité Organizador Local (COL), pero a pesar de lo realizado, los tiempos para la FIFA no eran los más oportunos" , sostuvo.

Finalmente, fue consultado sobre si Perú será sede o no del Sudamericano Sub 17, a lo que confirmó que sí. "Yo puedo confirmarles que sí se juega en el país, en el estadio San Marcos. Hemos dividido el trabajo y los esfuerzos para esto y vamos a realizar un Sudamericano que esté a la altura de las grandes competencias en cuanto a organización".

Cabe resaltar que, la FIFA comunicó este último viernes que Perú dejaba de ser la sede oficial del Mundial Sub 17, siendo finalmente Brasil el país elegido para de ahí en más llevar este evento. Lamentable, sí, pero con la lección de que no se puede ser tan desorganizados para un tema el cual ya tenía un tiempo estimado.