El día que Mario Vargas Llosa puso de pie a todo el Estadio Santiago Bernabéu

El mundo despide a una de las figuras más trascendentales de la literatura en español. Mario Vargas Llosa, novelista, ensayista, periodista, político y pensador, falleció a los 89 años en su hogar del distrito de Barranco, en Lima. 

Su partida representa un profundo duelo para el ámbito cultural global, ya que se trata de uno de los escritores más influyentes del siglo XX y XXI. Aunque no se han confirmado las causas exactas de su muerte, su legado permanece más vivo que nunca en cada una de sus obras, ideas y pasiones.

Nacido en Arequipa en 1936, Mario Vargas Llosa fue autor de más de veinte novelas, muchas de ellas consideradas pilares de la literatura contemporánea en español. Títulos como La ciudad y los perros, La casa verde y Conversación en la Catedral rompieron esquemas narrativos y reflejaron, con aguda crítica, las realidades sociales y políticas del Perú y América Latina.

Pero más allá de las letras, Mario también tuvo un alma profundamente ligada al deporte. Desde su infancia, alentó con fervor a Universitario de Deportes, equipo del que se confesaba hincha desde sus años escolares.

Fue justamente su entorno familiar, en especial sus primos, quienes lo llevaron por primera vez a un estadio para ver al cuadro crema, naciendo así un vínculo emocional que nunca se rompió, ni siquiera en los años en los que vivió lejos del Perú.

En Europa, donde consolidó su carrera literaria, encontró un segundo amor deportivo: el Real Madrid. Ya instalado en la capital española, se definía como un “madrileño viejo” y abrazó los colores del club blanco, al que admiraba no solo por su juego, sino por su tradición, elegancia y grandeza institucional.

Esa relación alcanzó su punto culminante en 2010, cuando fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura. Como homenaje, el Real Madrid le brindó un reconocimiento especial: el 4 de diciembre de ese año, Mario Vargas Llosa fue invitado a realizar el saque de honor en el estadio Santiago Bernabéu antes del partido frente al Valencia. Acompañado por Iker Casillas, recibió una ovación cerrada de todo el estadio. El presidente Florentino Pérez le entregó una maqueta del Bernabéu y lo calificó como "uno de los grandes orgullos del mundo hispano".

Mario Vargas Llosa se marcha dejando una estela imborrable en la cultura, la política y el deporte. Su amor por Universitario y el Real Madrid revela una faceta emocional y cercana que lo conecta aún más con sus lectores y compatriotas. Su obra, su pensamiento y su pasión seguirán siendo fuente de inspiración por generaciones.