Mauricio Sarri: "Si Hazard quiere irse, tiene que hacerlo ya"

Las puertas abiertas del club de sus amores lo esperan, y las del que lo acogió en Inglaterra parecen cerrarse de a pocos, con aroma a nostalgia y adiós. Así parecen acabarse los días de Eden Hazard en el Chelsea, tras las nuevas declaraciones del técnico del cuadro ‘Blue’, Mauricio Sarri, quien consideró que, si el atacante belga desea abandonar Stamford Bridge por el Santiago Bernabéu del Real Madrid, no debe, sino tiene que hacerlo.

"Eden tiene 28 años. Si se quiere ir, creo que tiene que hacerlo", fueron las últimas palabras del italiano con respecto al eterno rumor sobre la llegada del extremo ofensivo al conjunto de la capital española.

Eso sí, el entrenador de los londinenses no ocultó su admiración por su aún jugador, añadiendo que, de ser posible, desearía que Eden Hazard siga besando el escudo de los campeones de Europa en 2012.

"Por supuesto, yo espero que ocurra lo contrario, espero que se quede aquí", finalizó Sarri, quien hace unos días criticó la capacidad de liderazgo del futbolista, a quien reconoció como un excelente jugador, pero que no le estaba dando todo su potencial al momento de ponerse el equipo al hombro.

"En este momento Eden Hazard es más un jugador individual. Es muy importante para nosotros porque es un gran jugador. Siempre puede ganar un partido en uno o dos minutos, pero en este momento no es un líder, sino un gran jugador, uno de los mejores del mundo. Se está discutiendo su futuro con el club, pero no sé nada más. No creo que aún haya decidido si quiere quedarse o buscar una nueva experiencia en otro lugar, pero mientras siga aquí debe hacer más, porque tiene un nivel más alto del que muestra su rendimiento. Necesita respetarse a sí mismo ", manifestó el estratega en conferencia de prensa. 

Por su parte, el 10 del Chelsea ha señalado en varias oportunidades que “si el Real Madrid me quiere, ya sabe lo que tiene que hacer”, poniendo en manifiesto sus tremendas ganas de vestirse de blanco. Mientras tanto, permanece en Londres, en medio de un amor que parece haberse desgastado. Y cuando eso sucede, la mejor salida, probablemente, sea un último “adiós”.