Por: EFE • Futbolperuano.com

Real Madrid venció 2-0 al Eintracht Frankfurt y conquistó la Supercopa de Europa 2022

Con goles de David Alaba y Karim Benzema, Real Madrid doblegó a Eintracht Frankfurt.

Actualización
Karim Benzema anotó y llegó a los 324 goles con el Real Madrid. Foto: EFE
Karim Benzema anotó y llegó a los 324 goles con el Real Madrid. Foto: EFE

Con goles de David Alaba y Karim Benzema, Real Madrid doblegó a Eintracht Frankfurt.

El Real Madrid conquistó su quinta Supercopa de Europa de fútbol para pasar a ser el equipo más laureado de la competición, iniciando el curso con una imagen repleta de autoridad, superior a un Eintracht Frankfurt que cambió su identidad, con excesivo respeto al campeón de Europa, que se topó con Thibaut Courtois y cedió a los tantos de David Alaba y Karim Benzema.

Un equipo que gana cada final que juega exhibiendo una seguridad en sí mismo encomiable. Sin caras nuevas ni pruebas que encajar. Con los mismos referentes. El salvador Thibaut Courtois, la conexión letal Vinícius-Benzema. Con el dominio de un centro del campo de leyenda que añade un logro más a su extenso historial. El Real Madrid de Carlo Ancelotti, apuesta segura en las grandes citas.

Medirse al campeón de Europa y hacerlo tras recibir un set del Bayern en su estreno en la Bundesliga, fue una invitación al Eintracht a no arriesgar en exceso, a ser conservador. Más aún sin su estrella Filip Kostic, a punto de ser anunciado por la Juve, con Santos Borré aislado en punta. Su planteamiento provocó un inicio insípido. Sin espacios. Fútbol control con ausencia total de vértigo.

Sólo el desgaste físico o un error podría decantar el partido en momentos de control. Y lo cometió Mendy al borde del cuarto de hora. En salida de balón con una pérdida que provocó un mano a mano de Kamada ante Courtois, gigante de nuevo, tan decisivo como en la final de la Champions sacando el disparo abajo.

Con esa seguridad que transmite a sus compañeros desde portería, el Real Madrid sintió desde una acción de raza de Fede Valverde que la diferencia de calidad se plasmaría en cuanto diese un paso al frente y se liberase de las ataduras. Lo hizo el uruguayo, encontrando espacio en el carril derecho para servir el balón atrás a Benzema que regaló el tanto a Vinícius. No lo pudo celebrar porque Tuta lo evitó bajo palos.

El campeón de Europa había tardado tres minutos en responder. Cualquier idea equivocada del Eintracht quedaba desterrada. Comenzaba a sentir el peligro de un equipo que no perdona en las grandes citas. Tuvo paciencia para amasar el duelo el Real Madrid, sin brillo pero con dominio, hasta que golpeó. En un minuto tumbó al rival. Había volado Trapp para evitar un gran gol de Vinícius, en acción individual desde la banda, rompiendo con velocidad y soltando un gran disparo.

Nada pudo hacer cuando tras un saque de esquina, Benzema se suspendió en el aire en un gran salto, cabeceó a una zona donde no se esperaba la aparición de Casemiro, que cedió en bandeja de oro el tanto a Alaba. Lo más difícil ya estaba conseguido. El cerrojo alemán se abrió y estaba obligado a regresar a su identidad. A recuperar la valentía que había dejado en el vestuario.

El daño pudo ser mayor antes del descanso cuando Benzema falló lo que últimamente no perdona. Tras robo de Kroos, como si de un penalti se tratase, golpeó de interior tan ajustado al poste que se le fue por centímetros. El fútbol madridista se afinó en el segundo acto. Encontró la fiabilidad a base de combinaciones repletas de criterio por el interior. Esos momentos en los que la clase de Modric se impone y desafía cualquier lógica sobre la edad o el paso del tiempo.

La sentencia parecía cuestión de tiempo. Vinícius, incansable en la búsqueda del gol, se volvió a topar con Trapp, el travesaño repelió un zurdazo desde la frontal de Casemiro cuando los cambios ofensivos del Eintracht provocaban la aparición de espacios. El riesgo es enemigo de un Real Madrid que te mata en velocidad, con Vinícius como referente. Su buena lectura de espacios por la izquierda precedió el regreso de la conexión con Benzema que no faltó a su cita con el gol.

Un tanto especial para Karim, criticado años atrás por su falta de pegada y ahora máximo referente goleador. Superó a Raúl como segundo artillero de la historia madridista. Ya solo por detrás del jugador al que tanto asistió, Cristiano Ronaldo, cuyo adiós provocó una de las mayores mutaciones de un futbolista.

Cualquier intento del Eintracht fue en vano. Acabó con tres delanteros pero sin inquietar más a Courtois. Ancelotti tuvo tiempo de hacer debutar a Rüdiger y Tchouameni, de realizar un guiño a Ceballos en momentos en los que decide su futuro. El Real Madrid inició el curso exhibiendo firmeza el camino al mayor desafío.

. Ficha técnica:

2 - Real Madrid: Courtois; Carvajal (Rüdiger, m.85), Militao, Alaba, Mendy; Casemiro, Kroos (Tchouameni, m.85), Modric (Rodrygo, m.66); Fede Valverde (Camavinga, m.76), Vinícius (Ceballos, m.85) y Benzema.

0 - Eintracht: Trapp; Touré (Lucas Alario, m.70), Tuta, N'Dicka; Knauff, Rode (Gotze, m.58), Sow, Kamada; Lenz, Lindström (Kolo Muani, 58); y Borré.

Goles: 1-0, m.37: Alaba. 2-0, m.65: Benzema.

Previa del partido:

Real Madrid inicia en Helsinki, asumiendo el favoritismo que le otorga la condición de campeón de la 'Champions League', el gran reto jamás conseguido en su historia, conquistar los seis títulos a los que opta, con una primera final, la de la Supercopa de Europa ante un Eintracht Frankfurt mermado sin Filip Kostic, a un paso de ser traspasado al Juventus.

El duelo se jugará este miércoles 10 de agosto desde las 14:00 horas peruanas (19:00 GMT) en el Estadio Helsinki Olympic y será transmitido por ESPN y Star +. También podrás SEGUIR EL MARCADOR EN VIVO DESDE AQUÍ

La puesta de largo de un Real Madrid reforzado como bloque con los fichajes de Rudiger y Tchouaméni. El primer paso de un desafío jamás logrado para un equipo que ha demostrado que los imposibles no existen. Campeón indiscutible de LaLiga, de la Supercopa de España y una Liga de Campeones, la decimocuarta del rey de Europa, en la que, uno a uno, fue tumbando a base de remontadas a cada favorito al que se midió.

El regreso inesperado de Carlo Ancelotti tras el fin de ciclo de Zinedine Zidane, se regó de títulos y éxito. El italiano, que ya no entrenará más cuando acabe su segunda etapa en el Real Madrid, quiere seguir haciendo historia. Para comenzar, si supera al Eintracht se convertirá en el entrenador con más Supercopas de Europa superando a Pep Guardiola. Un nuevo registro para el único que venció las cinco grandes Ligas, con un currículum de tantos éxitos que le sitúan entre los mejores de la historia y que, este curso, podrá ampliar.

Una de las virtudes de 'Carletto' es la gestión de grupos, su forma de manejar vestuarios con la experiencia adquirida de su exitosa etapa de jugador. En Helsinki tendrá un guiño a los campeones. Aquellos que convirtieron en realidad lo que parecía imposible y acabaron levantando la 'orejona' al cielo de París.

Se espera el mismo equipo titular que derrotó al Liverpool. Con Fede Valverde por delante de Rodrygo o Marco Asensio, quizás más apropiados para un partido en el que el dominio recaerá en el Real Madrid. Con el salvador Thibaut Courtois como referente desde la portería y Karim Benzema, ya primer capitán, como líder absoluto del equipo y de un ataque en el que regresa la sociedad de éxito creada con Vinícius.

Los 'tres tenores' -Casemiro, Kroos y Modric-, el "triangulo de las Bermudas" como bautizó Ancelotti, juntos desde el inicio. Nunca perdieron una final en la que compartieron titularidad. Será menos habitual esta temporada, por el paso de los años y el empuje de jugadores jóvenes que aseguran el relevo, pero el primer título en juego será la oportunidad de extender el historial de un centro del campo que ya está entre los más exitosos de la historia madridista.

El Real Madrid tiene en su mano dar caza a AC Milan y Barcelona como equipos con más Supercopas de Europa (5). Su balance en el torneo lo convierten en la competición europea en la que peor estadística maneja, con cuatro finales ganadas de siete disputadas. La cita será la reedición de uno de los partidos más famosos de la Copa de Europa, 62 años después del 7-3 en Hampden Park (Glasgow). La conquista de la quinta con cuatro tantos de Ferenc Puskás y tres de Alfredo Di Stéfano.

En el presente, el Eintracht, que conquistó con brillantez la Liga Europa, llega a la Supercopa de Europa tras sufrir una goleada durísima en su estreno en la Bundesliga, 1-6 del Bayern, y tras perder prácticamente a Filip Kostic, que fue uno de los jugadores claves en la última temporada y está cerca de fichar por el Juventus.

El club anunció que prescinde de Kostic para medirse al Real Madrid, aunque el jugador siga de momento en su disciplina. El hueco que deja en la banda izquierda lo ocupará posiblemente Christopher Lenz, un jugador no tan incisivo en ataque.

Otro cambio probable puede producirse en ataque debido al buen segundo tiempo de Randal Kolo Muani ante el Bayern, una de las pocas cosas positivas en ese partido. Significaría que el colombiano Rafael Borré se viera relegado al banquillo. También el japonés Daichi Kamada podría volver al once en detrimento del danés Jesper Lindström.

Desde el viernes, una de las tareas del entrenador Oliver Glasner ha sido analizar con su equipo la debacle ante el Bayern. "Hablamos largo de ello. Ahora se trata dar un paso atrás y volver a lo fundamental", afirmó tras poner énfasis en el trabajo defensivo antes de medirse al Real Madrid con un planteamiento menos descarado en busca de su primera Supercopa en su primera aparición.