Toni Kroos superó en títulos a Cristiano Ronaldo

El mediocampista alemán Toni Kroos se confirmó como el rey del Mundial de Clubes: con su nuevo trofeo con el Real Madrid, conseguido este sábado, se convirtió en el primer jugador de la historia en alcanzar los cinco títulos en esta competición.

Kroos había llegado a esta cita en Emiratos Árabes Unidos igualado en el palmarés con Cristiano Ronaldo, cada uno con cuatro títulos. El astro luso, que tras la pasada temporada se fue del Real Madrid a la Juventus, no ha podido sumar en esta edición y Kroos aprovechó para adelantarle.

El internacional alemán consiguió su primer título en el Mundial de Clubes en Marruecos en 2013 con el Bayern de Múnich, tras superar al Raja Casablanca local en la final de Marrakech (2-0). Los otros cuatro títulos conseguidos por el jugador de Greifswald fueron ya como integrante del Real Madrid.

"La motivación con la que venimos es igual que en los años anteriores. Podemos ser campeones por tercer año consecutivo y no hay mayor motivación que esa", había advertido Kroos el miércoles después de la semifinal ganada al Kashima Antlers por 3-1.

Kroos y CR7 habían conseguido quedar al frente del palmarés con cuatro títulos el año pasado, al ganar el torneo disputado también en Emiratos. Dejaron entonces atrás a los barcelonistas Lionel Messi, Gerard Piqué y Sergio Busquets, y al ahora jugador del París Saint-Germain Dani Alves. Todos ellos fueron campeones con el equipo catalán en tres ocasiones, en 2009, 2011 y 2015.

La mancha de Rusia

Los Mundiales se le suelen dar bien a Toni Kroos. El primero que jugó fue en categoría Sub-17, en Corea del Sur en 2007, y fue elegido el mejor jugador del torneo, donde Alemania finalizó en tercer lugar.

Con el primer equipo de la 'Mannschaft' debutó en marzo de 2010 en un amistoso en Múnich contra la Argentina que entrenaba Diego Maradona y acudió al Mundial de ese año en Sudáfrica, donde jugó cuatro partidos, cayendo con su equipo en semifinales ante España, la futura campeona.

La gloria absoluta le llegó en Brasil en 2014, donde era titular indiscutible para Joachim Löw y donde su aportación fue clave, como en la histórica semifinal del 7-1 sobre Brasil, donde firmó un 'doblete' en el estadio Mineirao de Belo Horizonte. Días después conquistaba en Maracaná el título mundial.

Unos meses antes había llegado su primer título mundial de clubes, con el Bayern, y desde de Maracaná vinieron los conseguidos con el Real Madrid: en 2014 en Marruecos ante San Lorenzo (2-0), en 2016 frente al Kashima Antlers (4-2) en Yokohama y en 2017 ante Gremio (1-0) en Abu Dabi. A la lista se suma la victoria de este sábado frente al Al Ain (4-1).

Sin embargo, su último recuerdo de un Mundial no es de aquel partido feliz, sino de la pesadilla que vivió con Alemania en Rusia-2018, donde los defensores del título se estrellaron en la fase de grupos.

Incluso pese a su espectacular gol en el descuento para ganar 2-1 a Suecia en el segundo partido y que parecía dar esperanzas de poder avanzar a octavos. Ahora, en la capital emiratí, se ha sacado al menos esa espina rusa clavada desde hace más de cinco meses. AFP